Texto: Romanos 1 :16
Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego. Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
Rhema: Evangelio Poder de Dios
Reflexión:
Desde los tiempos de Jesús, proclamar el evangelio ha sido un motivo de persecución, los mismos apóstoles fueron perseguidos, sin embargo, jamás el temor, o la vergüenza tomo un lugar prioritario en sus vidas, porque sabían lo que compartían, ellos eran fieles testigos, servidores consagrados, y enloquecidos fehacientes ejecutores de la doctrina de salvación. Fue por ellos que a través de actos de valor, valentía, pero sobre todo de amor esparcieron el evangelio de salvación por amor de Jesús a resto de la humanidad, ellos no sabrían cual seria este restante del mundo, pero sabrían del impacto que obtendrían al saber que desde un punto desconocido de lo profundo del corazón estarían ofrendando su vida misma, solo por amor, llevando en sus espaldas no una carga si no una comisión que se adhirió a sus huesos y en su piel, en su mente y corazón, es decir no había otra cosa mas importante que seguir el camino que tan felizmente los transformo.
Motivación:
Que impacto podríamos tener como un verdadero impulsor del evangelio, llevando la sana doctrina a quienes lo necesiten, en todos nuestros entornos encontraremos la gran necesidad de ser impactados por el poder de Dios, un poder que transforma, que convierte las cosas, revierte otras, modifica estados de salud, actúa en una transformación milagrosa que tiene como fin ver la fuente de amor de Dios hacia la humanidad, un poder que reconforta y consuela, un poder que restaura familias y trae una gran paz al corazón. El evangelio es poder de Dios, un verdadero autentico y único poder que emana de la fuente de amor de Dios.
Aplicación:
Seamos parte de esto, con una convicción especifica de ser también la fuente de propagación de esto tan grandioso que es el poder del evangelio. ¡¡Animo seamos de bendición!!